viernes, 3 de noviembre de 2017

Una carta inesperada

Unos días después de escribir la entrada anterior en este blog, titulada "Nunca por un maldito número", la niña a la que aludía en ella, al entrar en yo al aula me esperaba de pie cerca de mi mesa. Me acerco a ella y a sus compañeros y les saludo. Veo que la chica está impaciente, hasta que me dice que me acerque a mi mesa y veo encima un folio escrito que yo supongo algo de trabajo que ha hecho y que quiere mostrarme como agradecimiento a mi apoyo incondicional.

Al acercarme a leerlo veo que no es lo que yo pensaba, si no que se trata de una carta que me ha escrito. La tomo en mis manos y comienzo a leerla en silencio mientras la niña me mira expectante. Al final me da un abrazo y un par de besos. Pensé que la había traído escrita de casa, pero no, me confesó que en el recreo se había metido a la biblioteca del centro a escribirla.

Una única cosa más. En el siguiente examen o control del tena que estábamos viendo, sacó un 9,8, simplemente es un número, nada más que eso pero, entre unas cosas y otras, está la mar de contenta, animada y motivada. Ya hemos hablado de que los números no son importantes, simplemente son eso, números, y que lo realmente clave es su esfuerzo, porque los números, como todo en esta vida suben y bajan y son solo una pista para saber si vamos por el camino correcto.

No comento nada más, prefiero que leáis la carta (colgada con los permisos correspondientes) y saquéis vuestras conclusiones. He “traducido” al final su contenido para hacer más rápida su lectura, aunque os muestro, sin la firma, el original:



Querido Javier Lozano:

Yo a tu lado me siento feliz.
Que sepas que es un crack dando mates.
Tú entiendes de mi enfermedad, tú eres de los pocos profesores que entienden tanto como tú. Eres un profesor que sabe explicar las mates bien y lo bueno es que si hace falta explicarme una raíz cuadrada mil veces pues lo haces.
Que sepas que a mí se me han dado mal las mates pero desde que estoy contigo se me dan genial porque tú sabes explicar.
Tú cada día me hace sonreír porque cuando llevo el día malo es entrar por la puerta y ponerme a sonreír.
Que sepas que nadie hay mejor que tú en el centro SV.
Tú eres un profesor bueno, majo y sólo decirte que me quedo sin palabras de todo lo que haces por mí.
También te doy gracias porque entiendes de mi enfermedad, desde que te conozco mi vida ha cambiado.
Muchísimas gracias por hacer libros sobre mi enfermedad.
Sólo decirte Javier que no me arrepiento de haberte conocido.
Muchísimas gracias por ayudarnos a mí y a los niños que tenemos de TDAH.
Te quiero muchísimo.
Tú formas parte de mi vida y corazón.
Javier te repito que me quedo sin palabras de todo lo que estás por mí.

Te quiero muchísimo.

Javier Lozano - 3 de noviembre - 2017

6 comentarios:

  1. Esa niña es especial, seguro las mates no se le daban bien porque no ha tenido los profes adecuados, pero eatoy segura de que le gusta escriibir y tiene talentos que ni ella sabe. Me he emocionado y me veo reflejada en esa niña que afortunadamente está con el mejor de los profesores. Gracias por compartir

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    1. Muchas gracias Ana Cris, es una niña especial como dices y necesita a una persona que esté pendiente de ella para que no le hagan daño y además para exigirle también y que vaya encontrando su camino. Trataré se estar el mayor tiempo con ella haciendo mi labor.

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  2. Muy orgulloso tienes que estar por lograr... que le gusten las mates!!!! Creo que es maravilloso que con tus acciones logres un cambio tan positivo.

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    1. Es una maravilla verla trabajar. Seguiremos por el buen camino todo el tiempo que sea posible, que espero que sea todo el curso.

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  3. Estos "pequeños-grandes" reconocimienos manifiestan que efectivamente lo estás haciendo bien. Enhorabuena.

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